Otro ahogado en el B ravo

Por: René Gutiérrez G.
Fotos: José Mario Aguillón G.

      Poco antes del medio día del domingo 15 de este mes de mayo, elementos del cuerpo de rescate acuático de protección civil, rescataron y pusieron en tierra firme el cuerpo en estado de descomposición de un probable conciudadano que pensó alcanzar el sueño americano, pero en el intento, solamente alcanzó la muerte.

     Vestía un pantalón de mezclilla, no está identificado, pues en su pantalón, no tenía ningún documento que pudiera servir al fiscal investigador conocer su nacionalidad y su domicilio en esta nuestra República.

     Francisco Torres Duval, criminólogo de la procuraduría de justicia, dictaminó que podría haber tenido entre 96 horas de muerto, tener algunos 25 años de edad y una estatura de un metro con 80 centímetros, lo que sí tenía muy notables eran dos grandes tatuajes en letras góticas, en su espalda y pecho al lado del corazón.

     El que le atravesaba la espalda se podía leer, Valenzuela y en el del pecho, Candelaria Madre Mía, también se había tatuado una águila, como símbolo nacional, por lo que podría suponerse que fuera de algún estado de la República, queda a las autoridades investigar de cuál de los 32.

     Según el Comandante del cuerpo de rescate, Daniel Zapata Garza, les hablaron del centro de comando, mejor conocido como C-4, alrededor de las 8 de la mañana con 30 minutos, diciéndoles que en las proximidades del puente internacional Reynosa Hidalgo flotaba el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino, pero fueron a rescatarlo, como a dos kilómetros al oriente del lugar mencionado.

     El oficial secretario de la agencia segunda del ministerio público, dio fe del hecho y luego ordenó el levantamiento del cuerpo para la práctica de la autopsia de ley en el Semefo y fueron empleados de una funeraria, quienes trasladaron el cadáver de dicho lugar a la morgue de la procuraduría.