¿Negligencia o burocratismo médico?

Texto: René Gutiérrez G./Fotos :José Mario Aguillón G.

     Fue dado de alta una y otra vez de la Cruz Roja de Reynosa, cuando se decidieron a dar el “pase” para el Hospital General la muerte prácticamente lo llevaba de la mano, el joven de 17 años posiblemente fue golpeado pero jamás lo reveló y su madre desconoce por completo que pasó.

     Esta historia de negligencia o burocratismo médico comenzó el 22 de abril a una semana de sus primeros malestares manifestados por Alan Heriberto Ramírez Amaya, adolescente que habitaba en la colonia Ferrocarril en la ciudad de Río Bravo.

     Su madre María Josefina Ramírez Amaya de 39 años, regresó del mandado el 14 de abril y encontró a su hijo con algo de jaqueca le pidió le aplicara compresas en la frente, después se fue a casa de su prometida con la que ya cohabitaba, los malestares aparentemente se disiparon un tanto.

     Pero el 22 de abril y comenzaron de nuevo, acudieron a la Cruz Roja de Reynosa donde luego de auscultarlo aún con problemas provocados por él mismo lo dieron de alta, el 23 regresaron esta vez el médico pudo hacer su trabajo le dieron algunos “chochos” y lo enviaron a casa porque no tenía nada, no obstante a los golpes que presentaba en tórax y huellas de arrastramiento en la espalda lo cual tampoco dieron aviso al Ministerio Público.

     El 24 otra vez buscaron la ayuda “profesional” en la benemérita institución y de vuelta a casa con el alta firmada por el médico, desgraciadamente el 25 llegaron a la sala de urgencias, ahora si consideraron que debía ser hospitalizado, solo para que en un par de horas dejara de existir.

     El Médico Forense determinó vía económica que había daños severos internos por traumatismo, es decir por golpes que llevaron a una falla generalizada que convocaron a la muerte.